A pesar de las recurrentes denuncias de vecinos, persiste la problemática del basural a cielo abierto en terrenos del Barrio Alfar, que fueron donados por el municipio al Obispado.
La desaprensión de la Curia se conjuga con la indiferencia de las autoridades municipales. Dichos terrenos en cuestión están ubicados en la intersección de las calles 38 y Astor Piazzolla del Barrio Alfar, y son recurrentes las denuncias sobre el estado de abandono y desidia en que se encuentran los mismos, lo cual los convierte en potenciales focos de infección, insalubridad e inseguridad.
El incumplimiento del cargo de la donación para fines pastorales en el Barrio Alfar no parece haber inmutado a las administraciones municipales, que se sucedieron durante esas casi dos décadas transcurridas.
Cabe recordar que la donación de estos terrenos – identificados catastralmente como Circunscripción IV, Manzana 44, Parcelas 1, 21 y 22 – incluyó, también, una parcela ubicada en el Barrio Santa Rosa de Lima, instrumentándose a través de la ordenanza Nº 14103, sancionada el 28 de junio, y promulgada el 17 de julio de 2001, que los destinó a la Obra Don Orione de la Parroquia San José, con la finalidad de construir Centros Comunitarios Parroquiales.
Salvo en Santa Rosa de Lima donde se construyó una parroquia, en los lotes de El Alfar además de no darse cumplimiento, durante casi dos décadas, al cargo de la donación, la falta de compromiso del Obispado dio lugar a la existencia de un basural a cielo abierto, que motivó la primera presentación del vecino lindero Fabio García, ante el HCD, efectuada el 1 de diciembre de 2014, dando origen a la formación del expediente 2014 – N – 301.
Roberto Latino Rodríguez
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