El radical riojano estaba internado en el hospital Ramos Mejía. Son cinco los detenidos por el ataque al legislador nacional.
Héctor Olivares, el diputado nacional atacado a balazos el jueves pasado en la Plaza Congreso, murió ayer como consecuencia de los disparos recibidos en el abdomen. El legislador riojano nunca logró salir del estado crítico en que lo dejó la agresión.
Operado de urgencia el mismo jueves, Olivares murió en el hospital Ramos Mejía, donde se encontraba internado tras el ataque en el cual perdió la vida su amigo, el funcionario nacional Miguel Yadón, aparentemente el blanco original del crimen.
El parte médico brindado minutos después del día del ataque advertía que el legislador de Cambiemos se encontraba en estado crítico debido a que una bala que ingresó por la zona abdominal le había lesionado órganos vitales como el hígado, el colon, el páncreas y la vías biliares.
Por esas heridas había sido operado de urgencia en una intervención “para salvarlo de la muerte”, según explicó Juan Pablo Rossini, subdirector del hospital Ramos Mejía.
Olivares, de 61 años, fue electo en 2015 diputado por Cambiemos y su mandato vencía el 10 de diciembre próximo. Además, era presidente de la UCR de La Rioja. Ingeniero agrónomo de profesión, en su perfil de la red social Twitter se definía como “productor olivícola y arauqueño”.
Más temprano Olivares había sufrido “una falla multiorgánica”, luego de que el sábado a la noche lo sometieran a una segunda operación.
La UCR publicó en su cuenta verificada de Twitter: “Murió Olivares. Con mucha tristeza acompañamos a su familia y a sus seres queridos. Exigiremos justicia y que los asesinos cumplan una condena efectiva”.
Por la misma vía, el senador oficialista Federico Pinedo expresó: “Un gran dolor la muerte de Olivares. Un fuerte abrazo a su familia, correligionarios y amigos”, escribió.
Olivares y Yadón fueron atacados, a las 6.51, en Sáenz Peña y Avenida de Mayo, a metros del Congreso de la Nación y mientras realizaban una camina de rutina.
Las cámaras de seguridad de la zona reflejaron cómo desde un automóvil Volkswagen Vento que estaba estacionado en el lugar salió una ráfaga de disparos.
Yadón cayó inmediatamente en el lugar, mientras que Olivares, visiblemente herido, caminó unos pasos y se sentó sobre el cordón de la vereda.
Segundos después, un hombre bajó del vehículo, se acercó a las víctimas y habló con alguien en el interior, que posteriormente también salió caminando.
Inmediatamente, el auto partió del lugar. El ataque generó una gran consternación en el mundo de la política.
El viernes, durante un allanamiento, fue hallada en la casa de Juan José Navarro Cádiz (25) un arma que, según se comprobó,fue usada para balear al diputado y a su asesor.
La constatación del arma homicida, en principio, estaría respaldando la hipótesis que dio Juan Jesús Fernández (42) en la madrugada del sábado, y en la que coinciden cuatro de los otros cinco detenidos: que fue su primo El Cebolla, quien lo acompañaba en el auto, el que hizo los disparos, imprevistamente, porque estaba borracho y drogado.
Según fuentes judiciales, esa versión encaja con los testimonios de cinco de los seis integrantes del clan de la comunidad gitana que están detenidos. Sostienen que el crimen fue al azar, producto del mal estado en el que se encontraba el asesino.