El productor de espectáculos Pablo Baldini, responsable de NA Producciones, confirmó que resolvió suspender el show de Vicentico previsto para el 20 de noviembre en el estadio Polideportivo.
Baldini indicó que el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires “todavía no reguló la actividad” y a su vez “hay que ver qué hace el Municipio”, por lo que decidió “esperar las disposiciones”.
“Hay que ser prudente, quizás me anticipé un poco con el show de Vicentico. Será más adelante, voy a esperar”, agregó.
Asimismo, refirió que tenía “tres shows programados” para el próximo fin de semana y que debió reprogramarlos por las “contradicciones” en el protocolo.
“Más allá del tope nacional de las 1000 personas, se habilitó el 50% de aforo con dos metros y plan de vacunación entero. Pero hay que ver qué dice Provincia y cuándo lo dice. El Municipio quiere actividades, pero no puedo ir en contra de lo que dispone la Provincia, que implica lo que es Bomberos y todo el plan de seguridad”, expresó.
Señaló, además que “un estadio no es cualquier cosa, las cosas hay que hacerlas bien”, dijo al confirmar que el show de Vicentico “deberá esperar” y que “seguramente se hará en otro lado”, agregando que “no está claro si es con dos metros de distancia o uno, si se va a exigir o no vacunación completa… eso te modifica, yo soy responsable y no voy a predicar una cosa y decir otra”.
“Yo soy profesional y responsable de las cosas que hago. La dicotomía está en lo que anunció el presidente de que el 1° de octubre volvían y se ampliaban actividades, pero no están reguladas. Larreta en CABA autorizó el 100% sin plan de vacunación, en las provincias cambia… no hay un protocolo como corresponde, falta coherencia”, cuestionó el productor, visiblemente molesto con la situación.
También cuestionó la “falta de control” por parte del Estado en relación a las aperturas anunciadas por el Gobierno a partir del 1° de octubre.
“Cuando se anuncia algo, la gente se empieza a mover. Ver lo que pasó en el partido del domingo (Boca-River) fue un papelón, me dio una impotencia absoluta. Las señales son claras, pero no hacen que se cumplan”, sentenció Baldini.