Como era de prever con el pretexto de “no obtener respuesta del gobierno nacional ni provincial a un nuevo pedido formal para una mayor compensación de subsidios, y en función de la Ordenanza 25.397 a través de la cual el Concejo Deliberante delega al Departamento Ejecutivo las facultades para fijar la nueva tarifa de boleto del Transporte Público Urbano de Colectivo”, el intendente Guillermo Montenegro decretó que el aumento regirá a partir del 5 de mayo, determinando que el boleto plano pase a costar $ 74,38.
En el decreto, Montenegro aduce que “es prioridad de este Departamento Ejecutivo garantizar la accesibilidad de los usuarios al sistema de transporte público colectivo de pasajeros”, y explica que aumento del costo de la tarifa se realiza considerando la inflación informada por INDEC, omitiendo en la base de cálculo el impacto de la caída de pasajeros”.
También refiere que “el reducido aumento de las compensaciones nacionales y provinciales en el período analizado pese a las permanentes gestiones llevadas a cabo por el Departamento Ejecutivo tiene como resultado un significativo traslado de costos a la tarifa que debe abonar el usuario e implica un importante impacto adicional al derivado del proceso inflacionario sobre ésta”.
Cabe traer a colación que la cuenta regresiva hacía de un nuevo manotazo al bolsillo de los usuarios, como aconteció el 27 de mayo del año pasado, se inició a partir de la sesión del 31 de marzo, con el voto mancomunado de la “Entente Cordiale” de Acción Marplatense y el interbloque de Juntos por el Cambio, donde se aprobó la cesión de facultades al intendente Guillermo Montenegro, con el trillado argumento de encomendarle gestiones ante las autoridades nacionales para un tratamiento equitativo en materia de subsidios al servicio de transporte público de pasajeros.
En aquella ocasión, desde el bloque del Frente de Todos, el edil Vito Amalfitano cuestionó que “asistimos una vez más en este Cuerpo a un déjà vu, a una historia que se repite, se le otorgan al intendente facultades que le corresponden a este cuerpo y otra vez hablamos del pésimo servicio que se le da a marplatenses y batanenses que usan el transporte público de pasajeros”.
Asimismo, recalcó que “el colectivo va muy lento, se lo espera y no llega nunca, pero a un ritmo absolutamente diferente, mucho más rápido se resuelven otras cosas, porque a los tres días que se presentó la nota por parte de los empresarios, con el estudio de costos que determinó un valor del boleto de colectivo de $91,96, apareció el estudio de costos de la Municipalidad con sólo nueve centavos de diferencia”.
“Seguramente, después de que se otorguen las facultades aquí, en un rato el intendente ira más rápido que el colectivo a aumentar el boleto, apeló a que al menos el interbloque oficialista le transmita a Montenegro que, con la misma rapidez, les pida a los empresarios que el servicio se cumpla como corresponde”, concluyó
