Más allá del lanzamiento de medidas para contener la inflación, la misma no baja del 6%. Del mismo modo, para noviembre rondaría el 6%.
A pesar del enfriamiento de la economía, la inflación no baja del 6%. Del mismo modo, el porcentaje se conocerá este jueves. Mientras que desde el ministerio de Economía sostienen que continuará bajando la inflación en estos meses. En contraste, las consultoras privadas indican que este mes habrá una nueva aceleración en los precios como consecuencia de los aumentos estacionales.
Como se mencionó anteriormente, este jueves se conocerá la inflación de noviembre. En tanto, el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central arrojó un 6,1% mensual. Si se confirma este porcentaje habrá una pequeña baja en relación al 6,3% de octubre, con un acumulado del 76,6% en lo que va del 2022.
Entre tanto, la Consultora EcoGo sostuvo que la desaceleración será más pronunciada, y se llegaría al 5,5%, como consecuencia de los precios regulados en los alimentos, con una merma de un 6,8% que continuó en la primer semana de diciembre “por la implementación del programa ‘Precios Justos'”.
Por su parte, el relevamiento de precios minoristas de C&T para GBA indicó una suba del 6,2% en noviembre. Si esto se confirma, la interanual rondaría el 94,21%, siendo la más alta desde el año 1991: “hubo una tenue baja en lo que son bebidas y alimentos, pero no se reflejó en el resto de los productos”.
Por otro lado, desde la cartera de Economía destacan el programa de Precios Justos, con el fin de congelar 4.000 productos por cuatro meses con un aumento del 4%. Del mismo modo, este porcentaje es fundamental ya que podría llegar a una inflación anual del 60% en el 2023. De igual modo, se muestran optimistas y sostiene que seguirá habiendo una desaceleración de la inflación en los próximos meses.
La expectativa del REM
Mientras que el REM en diciembre desprende una aumento del 6,3% mensual. Asimismo, desde la Consultora Analytica sostuvieron que se observa un porcentaje similar al de noviembre, ya que habrá aumentos regulados en los combustibles, tarifas y prepagas.
Más allá del enfriamiento de la economía, la inercia inflacionaria no cede. Así, las cosas el PBI crecerá más de los esperado a principios del año por el mercado y el Gobierno arriba del 5%, pero con un último trimestre en baja.
Desde Ecolatina manifestaron: “si bien seria esperable que una demanda más débil ejerza menor presión sobre la dinámica alcista de precios, la naturaleza del fenómeno actual de inflación crónica hace prever que esto no ocurra con la fuerza que podría esperarse en otro contexto, haciendo más factible la configuración de un escenario de estanflación como el que ha experimentado la Argentina desde el año 2012”.
Por último, la Consultora destacó algunas frases en este relevamiento: la inercia y desencaje de expectativas, fuerte distorsión en los precios relativos, devaluación acelerada y ajustes de servicios regulados y restricciones a las importaciones en el marco de la brecha cambiaria. Del mismo modo, recordaron el escaso efecto de las anclas nominales tradicionales, tipo de cambio, salarios y tarifas.