En el día de ayer, el INDEC difundió la inflación de noviembre que arrojó un 2,4%. Del mismo modo, este dato se ubicó muy por debajo de los números que informaban las Consultoras. Mientras que los alimentos aumentaron un 0,9%. La interanual llega a un 166%.
Como se mencionó anteriormente, en el día de ayer el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) informó que la inflación de noviembre fue de un 2,4%, marcando una desaceleración en los precios. Mientras que la interanual, llega al 166%.
Sin lugar a dudas, este índice es el más bajo desde julio del 2020. Del mismo modo, este número va en línea con lo dicho por el Gobierno Nacional y del mercado, que hablaban de una proyección del 3%. Cabe destacar que en octubre, la inflación había sido de un 2,7%, con una interanual de un 193%.
Mientras que el ministro de Economía, Luis Caputo celebró este porcentaje en un mensaje en X: “este 2,4% de inflación de noviembre es el más bajo desde julio del 2020”, que en aquellas oportunidad fue de un 1,9%, y esgrimió: “alimentos 0,9%, bienes 1,6%, canasta básica alimentaria 1,1%, canasta básica total 1,5%. El proceso de desinflación continúa. Cada vez más cerca del crawling peg al 1%“.
En contraste, el rubro que más aumentó fue Educación (5,1%), le siguió Vivienda, Agua, Electricidad, Gas y Otros Combustibles (4,5%), como consecuencia de la suba en los alquileres y en las facturas de los servicios públicos. Mientras que el rubro que menos subió fue Equipamiento y Mantenimiento del Hogar (1,5%) y Alimentos y Bebidas no Alcohólicas (0,9%).
Por su parte, el IPC Núcleo ascendió a 2,7%, siendo el menor registro desde septiembre del 2020. De igual forma, este índice no incluye los Precios Regulados, que crecieron un 3,5%, ni estacionales, que descendieron en un 1,5%.
A su vez, este último dato exhibe con claridad la evolución de la inflación en la actualidad, que se produce a dos ritmos bien diferenciados.
Del mismo modo, los Alimentos crecieron menos de un punto, los servicios siguen subiendo entre un 4% y un 5%. En ese punto, esto aplica en el ajuste fiscal y monetario que está llevando adelante el Gobierno de Javier Milei, mientras que en el segundo caso impacta la quita de los subsidios y el atraso generado por los controles y acuerdos de precios en el pasado.
La evolución de la inflación
Por otro lado, el promedio de los servicios tuvo un aumento del 4,4% y bienes y servicios subió bastante menos, en un 1,6%, demostrando visibles diferencias entre ambos indicadores.
“La inflación de noviembre estuvo claramente por debajo de lo esperado por el mercado, que se situaba en un 2,8%. El dato del mes se vio influenciado por una fuerte desaceleración de alimentos. Para diciembre proyectamos que la inflación se acercará nuevamente al 3%, dado el nuevo incremento de los servicios regulados y el efecto estacional propio del mes. Como resultado, esperamos cerrar el año con una inflación de 118%, lo cuál manifiesta una desaceleración de 93 puntos porcentuales respecto al año pasado”, sostuvo Lautaro Moschet, economista de la Fundación Libertad y Progreso.
De igual forma, una de las claves para alcanzar ese número inferior a lo previsto pasó por el rubro Alimentos bajaron considerablemente: “el rubro de menor incremento en el mes fue justamente el de mayor ponderación, alimentos y bebidas no alcohólicas, que apenas se incrementó en un 0,9% mesual. El resultado estuvo influido por una fuerte caída de más de 10%en en las verduras, pero hubo moderaciones en varios de los componentes. Una de las excepciones fue la carne, que este mes aumentó considerablemente”, señaló Camilo Tiscornia de la Consultora C&T.
Mientras que para la Consultora LCG, la baja de la inflación se basó en el ancla cambiaria del 2%, el equilibrio fiscal y la calma financiera que redujo al mínimo la brecha financiera: “en diciembre se suma la eliminación del Impuesto PAÍS y la flexibilización de las importaciones que también actuarán como disciplinadores, moderando los incrementos estacionales”.
De la misma manera, advirtió de cuáles son las condiciones para que el sendero de baja de la inflación se mantenga: “el éxito del proceso de desinflación y la convergencia hacia un régimen de baja inflación terminará de verse cuando desaparezca la disciplina cuasi-recesiva y se afiance la recuperación económica. También esta dinámica será dependiente de la evolución de las expectativas cambiarias“.
¿Cómo impactan los factores económicos?
Por otro lado, algunos analistas privados habían anticipado un índice similar al de octubre, con algunas variaciones mínimas entre las Consultoras. De acuerdo a las proyecciones del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central, el promedio estimado era de 2,8% para noviembre, con un pequeño repunte hacia fin de año como consecuencia a los factores estacionales.
Entre los productos y servicios que más aumentaron a lo largo de este mes, se destacaron los Combustibles, con incrementos entre el 2,8% y 3,2%, las tarifas de luz y gas subieron un 2,5%, y los servicios de salud, como las prepagas, con subas promedio del 5%. En el sector educativo, las escuelas privadas subieron un 4,5% en la ciudad de Buenos Aires (CABA) y 3,6% en la provincia de Buenos Aires.
Por último, si bien hay una baja en la inflación mensual y que genera de algún modo cierto alivio, el nivel de los precios continúa afectando los hogares. Además, de que se suma el efecto de fin de año, con un aumento típico en el consumo y ajustes en los precios estacionales, que podría representar un desafío para mantener la estabilidad en diciembre.